abril 10, 2015
Nuestros derechos en las redes sociales
Interesante artículo publicado en el portal jurídico del diario Expansión en el que aprendemos más de nuestros derechos a la hora de utilizar las redes sociales. Este es el contenido de la información
El gran aumento que ha experimentado el uso de internet en nuestra vida cotidiana ha plantea dudas y problemas jurídicos para los usuarios de muy diferente índole. Se ha incrementado de forma exponencial situaciones ante las que los usuarios no saben cómo actuar en muchas ocasiones, tales como reclamaciones por compras efectuadas, publicaciones de fotos sin nuestro consentimiento, insultos en foros, suplantaciones de identidad, etc.
Ante los insultos en foros de internet, tenemos que partir de la base de que hemos de dirigirnos al responsable del foro para que actúe y sepa que en él se están lesionando derechos de terceros susceptibles de indemnización. En cualquier caso, podría acudirse a la vía civil, para defender el honor y la imagen para que se retiren, e incluso solicitar una indemnización por daños y perjuicios. Además, si los insultos revistieran tal gravedad que pudieran constituir delito o falta, podría acudirse a la vía penal.
Si no se trata de insultos, sino de una publicación de fotos social sin nuestro consentimiento en una red social, hay que recordar que la imagen de una persona es un dato personal, por lo que podremos solicitar su retirada.
El uso creciente de las páginas de contactos hace que a veces se suban fotos nuestras sin nuestro permiso previo. En este punto hay que indicar que la página web es responsable de lo que en ella se publica, por lo que en primer lugar, hemos de contactar con el administrador de la página a través de los medios de contacto puestos a disposición de los usuarios y ejercitar el derecho de cancelación frente a la página web. En caso de ausencia de respuesta, tendremos que acudir a la Agencia Española de Protección de Datos.
Otra cuestión son los supuestos de suplantación de identidad en las redes sociales. Las condiciones de uso de estas redes no permiten tal hecho, por lo que si ocurre, hemos de dirigirnos a la compañía a través de los mecanismos a disposición de los usuarios y denunciar al perfil suplantador. En última instancia, se puede valorar la posibilidad de interponer una denuncia.
Ocurre de forma más habitual de lo que se piensa que tras la compra de un teléfono móvil, se da de alta una línea por internet usando nuestros datos. En este caso, podría tratarse de un delito de usurpación de estado civil, e incluso, de un delito de falsedad documental en concurso medial con un delito de estafa. Lo que tendríamos que hacer en primer lugar es ordenar al banco devolver los cargos y presentar una reclamación informando de la falsedad a la compañía de telefonía. Es aconsejable también solicitar copia de la grabación o del contrato supuestamente firmado para verificar la firma, e informar de la denuncia penal presentada, exigiendo la baja inmediata. Es la propia compañía la que debe probar la existencia de un contrato válido.
Por otro lado, cada día realizamos más compras por internet, y pueden surgirnos dudas respecto a las reclamaciones frente a posibles problemas al realizarlas. En primer lugar, tenemos que coger constancia escrita de la reclamación. Si no hay respuesta y, se trata de una empresa con domicilio o establecimiento permanente en España o en la Unión Europea, podemos dirigir la reclamación ante los organismos de consumo. Si no es así, tendríamos que dirigirnos a los organismos administrativos o tribunales del lugar donde se encuentre ese negocio. Por ello, es necesario de cerciorarse de dónde radica la empresa a la que compramos a través de internet.
Una cuestión que es también importante a la hora de realizar compras por internet es asegurarnos de que la página web a través de la que las realizamos es segura y legal, es decir, si cumple los requisitos que impone la normativa de comercio electrónico y protección de datos. Para ello, han de constar de forma clara y comprensible los datos relativos al artículo en el que estamos interesados (como el precio, la forma de pago, el plazo de entrega, las formas de entrega y devolución, etc.), el nombre o la denominación social del responsable de la web, número de identificación fiscal, domicilio, datos de contacto…
Una cuestión de actualidad, en relación a las webs de citas, son las reclamaciones de los usuarios por cobros indebidos a pesar de haber solicitado la baja de sus servicios. En estos casos se recomienda remitir una reclamación formal, y si no se atiende a la petición, se deben denunciar los hechos ante los organismos de consumo o ante los juzgados de primera instancia del lugar de residencia del usuario.
Otras reclamaciones a estas webs de citas se refieren a posibles incumplimientos, por entender que, a pesar de los test de compatibilidad realizados, las personas con las que se proponen citas no tienen afinidad alguna, o porque el número de citas es inferior al contratado, o éste disminuye drásticamente pasado un tiempo de la contratación del servicio.
En cualquier caso, lo pertinente es solicitar la asistencia jurídica de profesionales cualificados en la materia, para que estos problemas puedan ser finalmente solucionados.